UNA NUEVA PRIMAVERA ESPIRITUAL


«Si se promueve la lectio divina con eficacia, estoy convencido de que producirá una nueva primavera espiritual en la Iglesia… La lectura asidua de la Sagrada Escritura acompañada por la oración permite ese íntimo diálogo en el que, a través de la lectura, se escucha a Dios que habla, y a través de la oración, se le responde con una confiada apertura del corazón… No hay que olvidar nunca que la Palabra de Dios es lámpara para nuestros pasos y luz en nuestro camino»

Benedicto XVI, 16 septiembre 2005


HISTORIA Y PASOS DE LA LECTIO DIVINA




INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO





domingo, 3 de mayo de 2015

Lectio Divina: Lunes, 4 de Mayo, 2015: Evangelio según San Juan 14, 21-26. : (5ª Semana del Tiempo de Pascua - Ciclo B -)

La "Lectio Divina" es un método para leer, meditar, rezar, actuar y encarnar la Palabra de Dios en la vida diaria. El método consiste en 10 pasos progresivos muy fáciles de realizar y que permiten a cada cristiano entender y realizar la Voluntad de Dios.
1°. PREPARACIÓN:
Espíritu Santo, ilumina mi entendimiento, para que al leer, meditar y estudiar la Sagrada Escritura de hoy, sienta la presencia de Dios Padre que se manifiesta a través de tu Palabra.
Abre mi corazón para darme cuenta del querer de Dios y la manera de hacerlo realidad en mis acciones de cada día. Instrúyeme en tus sendas para que, teniendo en cuenta tu Palabra, sea signo de tu presencia en el mundo. Amén.

2°. LECTURA:
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan. 14, 21-26
A la Hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús dijo a sus discípulos: “El que recibe mis mandamientos y los cumple, ése es el que me ama; y el que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me manifestaré a él”. Judas –no el Iscariote– le dijo: “Señor, ¿por qué te vas a manifestar a nosotros y no al mundo?”. Jesús le respondió: “El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él. El que no me ama no es fiel a mis palabras. La palabra que ustedes oyeron no es mía, sino del Padre que me envió. Yo les digo estas cosas mientras permanezco con ustedes. Pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi Nombre, les enseñará todo y les recordará lo que les he dicho”.

3°. MEDITACIÓN:
A. COMENTARIO DE INTRODUCCIÓN
Toda la semana seguimos escuchando el discurso de Jesús en su Ultima Cena.
Jesús se está despidiendo de sus discípulos sin embargo queda la promesa de permanecer en Él.
El camino es uno: guardar y cumplir su Palabra.
Quien verdaderamente ama a Jesús hace vida su palabra, la encarna. 
La recompensa es la de un amor que sólo sabe darse en abundancia: El Padre lo amará, Jesús lo amará y se mostrará a él.
Jesucristo nos dice que amarlo es guardar su palabra, identificarse y hacer propio su modo de tratar todos con todos; es pasar por la vida haciendo el bien como Él lo hizo; es no calcular en la entrega; es querer sólo lo que quiere el Padre; es compadecernos ante los que padecen necesidades, ya sean materiales o morales; es orar con una actitud de humildad siempre y en todo momento.
No se trata de un amor puramente sentimental, hecho de palabras y de gestos sólo sensibles.
Cristo exige un amor comprometido y eficaz. La fidelidad a su palabra, nos va transformando hasta convertirnos en “casa de Dios”, “lugar de encuentro” para aquellos que buscan a Dios.
Ser discípulo es sentir la alegría profunda producida por el hecho de que Dios hace todo lo posible por compartir su vida con nosotros.
Dios mismo hace su morada en nosotros, nos convertimos en templos de Dios y de su Espíritu.
Como Jesús sabe de nuestra debilidad nos promete el don del Espíritu. 
El Espíritu Santo es el protagonista en nuestra vida de fe.
Para poder ir comprendiendo y profundizando lo que ha dicho Jesús, necesitamos el Espíritu que Jesús transmite a la comunidad como verdadero Maestro.

B. REFLEXIÓN DEL PAPA EMÉRITO  BENEDICTO XVI.
"El Evangelio nos ofrece un retrato espiritual implícito de la Virgen María, donde Jesús dice: "“El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él". Estas expresiones van dirigidas a los discípulos, pero se pueden aplicar en sumo grado precisamente a aquella que es la primera y perfecta discípula de Jesús. En efecto, María fue la primera que guardó plenamente la palabra de su Hijo, demostrando así que lo amaba no sólo como madre, sino antes aún como sierva humilde y obediente; por esto Dios Padre la amó y en ella puso su morada la Santísima Trinidad. Además, donde Jesús promete a sus amigos que el Espíritu Santo los asistirá ayudándoles a recordar cada palabra suya y a comprenderla profundamente, ¿cómo no pensar en María que en su corazón, templo del Espíritu, meditaba e interpretaba fielmente todo lo que su Hijo decía y hacía? De este modo, ya antes y sobre todo después de la Pascua, la Madre de Jesús se convirtió también en la Madre y el modelo de la Iglesia". (Benedicto XVI, 9 de mayo de 2010).
4°. ORACIÓN: Dialogo con el Divino Maestro

Dios habita en mí....y nada es igual!
Mi vida ha sido visitada por Dios,
Él habita en mi interior más profundo.
Él es el dulce huésped de mi alma,
no es posible vivir una vida trivial
teniendo como huésped al mismo Dios.
No es posible no asombrarse por esta verdad,
por esta extraordinaria realidad
que nos arrebata de la soledad,
levanta la dignidad de la existencia,
llena de gozo, da luz a nuestra vida grisácea,
nos sumerge en el mundo divino,
hace familiar la existencia con Dios,
desplaza el centro de interés
de toda la aventura terrena,
colorea de sentido toda acción.
No es posible no querer saltar de alegría
frente a este ser mío mortal
hecho templo de la Trinidad,
frente a este cuerpo mío corruptible
hecho santo e incorruptible por la intimidad con su Creador.

6°. CONSOLACIÓN: Es sentir íntimamente el "gusto" de la Palabra de Dios.

7°. DISCERNIMIENTO: Pensar y Discernir la Palabra.
¿Experimento en mi vida diaria el ser "habitado" por Dios?
¿Gozo al descubrir esta realidad que es puro don?
¿En qué se manifiesta?
¿Cambia mi modo de ver la vida?

8°. COMPARTIR: Comparto la Palabra.

9°. DELIBERACIÓN: Tomo una decisión concreta iluminado por la Palabra.

10. ACCIÓN CONCRETA: Propósito del día.
Voy a llamar o enviar un mensaje de paz, a esa persona con la que tuve un conflicto, buscando la reconciliación o, al menos, para propiciar la cercanía.
SANTOS DE HOY - PIDAMOS LA INTERCESIÓN DE TODOS ELLOS
-San Silvano, abad de Gaza (Palestina). mártir 311.
-San Ciriaco, mártir, s. IV, Jerusalén.
-Treinta y nueve mártires, Gaza, 311.
-San Julián, obispo, Jerusalén, s. IV.
-San Porfirio, mártir, Umbría (Italia), s. III.
-Santa Antonina, mártir, Nicomedia.
-San Florián, mártir de Austria, s. IV.
-Santa Pelagia y San Paulino, mártir, Tarso (Asia Menor).
-San Venero, Milán, 408.
-San Sacerdote, obispo de Limoges (Francia).
-San Godofredo o Gotardo, obispo de Hildesheim (Alemania), 1038.
-San Curcodemo, diácono, Auxerre (Francia), s. III.
-La fiesta del Santo Sudario, Turin.
-San Macario, obispo, discípulo de San Martín, siglo IV.
-San Antonio, abad, Tours, s. VI.
-Santa Catalina, convertida del judaísmo por las apariciones de la Virgen, Lovaina (Bélgica).
-Santa Elena, Troyes (Francia), 1209.
-San Etebredo, rey de Mercia, Inglaterra, 726.