(Radio Vaticano).-
La tarde del lunes 18 de mayo, el Papa Francisco recibió en Audiencia en el
Aula del Sínodo del Vaticano, a los Obispos de la Conferencia Episcopal
Italiana, reunidos con ocasión de su 68° Asamblea General.
En su
Mensaje el Obispo de Roma agradeció a los prelados por este encuentro y por
haber elegido el tema de la Exhortación Apostólica “Evangelii Gaudium” como
argumento a tratar en la presente Asamblea. Asimismo, el Santo Padre resaltó:
“la importancia de lo que se puede definir por sensibilidad eclesial: es decir,
apropiarse de los mismos sentimientos de Cristo, de humildad, de compasión, de
misericordia, de realidad y de sabiduría”.
“La
sensibilidad eclesial, afirmó el Sucesor de Pedro, implica no ser tímidos o
indiferentes para luchar contra la mentalidad de corrupción pública y privada
que ha logrado empobrecer a familias, jubilados, trabajadores honestos,
comunidades cristianas, descartando a los jóvenes y privándolos
sistemáticamente de toda esperanza sobre su futuro y sobre todo marginando a
los más débiles y necesitados”.
La
Sensibilidad eclesial, continuó el Papa que, “como buenos pastores, nos hace
salir hacia el pueblo de Dios para defenderlo de las colonizaciones ideológicas
que le quitan su identidad y dignidad humana”. Es esta sensibilidad la que se
manifiesta en las elecciones pastorales que realizamos. Además, “la
sensibilidad eclesial se revela concretamente en la colegialidad y en la
comunión entre los Obispos y sus sacerdotes; en la comunión entre los Obispos
mismos; entre las Diócesis ricas y aquellas en dificultad; entre la periferia y
el centro; entre la conferencia episcopal y sus obispos con el Sucesor de
Pedro”.