La
"Lectio Divina" es un método para leer, meditar, rezar, actuar y
encarnar la Palabra de Dios en la vida diaria. El método consiste en 10 pasos
progresivos muy fáciles de realizar y que permiten a cada cristiano entender y
realizar la Voluntad de Dios.
Espíritu
Santo, ilumina mi entendimiento, para que al leer, meditar y estudiar la
Sagrada Escritura de hoy, sienta la presencia de Dios Padre que se manifiesta a
través de tu Palabra.
Abre mi
corazón para darme cuenta del querer de Dios y la manera de hacerlo realidad en
mis acciones de cada día. Instrúyeme en tus sendas para que, teniendo en cuenta
tu Palabra, sea signo de tu presencia en el mundo. Amén.
2°.
LECTURA:
Evangelio
de nuestro Señor Jesucristo según san Juan. 14, 7-14
A la Hora
de pasar de este mundo al Padre, Jesús dijo a sus discípulos: “Si ustedes me
conocen, conocerán también a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han
visto”. Felipe le dijo: “Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta”. Jesús le
respondió: “Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no me
conocen? El que me ha visto, ha visto al Padre. ¿Cómo dices: “Muéstranos al
Padre”? ¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las
palabras que digo no son mías: El Padre que habita en mí es el que hace las
obras. Créanme: Yo estoy en el Padre y el Padre está en mí. Créanlo, al menos,
por las obras. Les aseguro que el que cree en mí hará también las obras que yo
hago, y aún mayores, porque yo me voy al Padre. Y yo haré todo lo que ustedes
pidan en mi Nombre, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si ustedes me
piden algo en mi Nombre, yo lo haré”.
Palabra del
Señor.
3°.
MEDITACIÓN:
A.
COMENTARIO
· En
el momento de la partida de Jesús de este mundo al Padre, el anhelo profundo y
escondido de todo hombre de querer ver al Padre aparece en los labios de
Felipe.
· La
pregunta de Felipe conduce a Jesús a la afirmación decisiva de que Él está en
el Padre y el Padre en Él y que Él mismo hace las obras del Padre. Al Padre
nadie lo ha visto: pero el que ha visto a Jesús, ya ha visto al Padre.
· El
que cree y acepta a Cristo, ha creído y aceptado al mismo Dios.
· Jesús
es la puerta, el camino, la luz, y en él tenemos acceso a Dios Padre.
· El
conocimiento que pide Jesús a Felipe significa pasar de una lógica, racional y
fría, a tener ojos para la realidad interior. Esta es la mirada de fe que
pide Jesús a Felipe. Dios no es algo que está arriba, ni abajo; está
entre los hombres y se llama Jesús.
· Jesús
es el rostro del Padre, la imagen acabada del Padre. Está entre nosotros,
acompaña nuestra existencia, vela por nuestra vida, tiene compasión de los
enfermos, atiende a los pobres. Sus predilectos son los excluidos, los
pecadores, los menospreciados de la sociedad. Va en busca de la oveja
descarriada a la que trae sobre los hombros.
· Jesús,
el rostro del Padre, nos da esperanza a los hombres de que un día, después de
haber caminado en esta tierra, se nos regalará la vida definitiva en Dios.
· Donde
hay hombres y mujeres que tienen la mirada limpia y el corazón abierto para
recibir a sus hermanos, donde hay alguien que ama y anda por un camino que le
puede costar su tranquilidad por vivir a favor de sus hermanos, donde existen
hombres que no se preocupan obsesivamente del mañana porque viven en las manos
del Padre, allí está Dios.
· Dios
anda entre las cosas de esta vida y está hablando: hay que saber
escucharlo.
B.
REFLEXIÓN DEL PAPA EMÉRITO BENEDICTO XVI.
« Cuáles
son nuestras raíces? Naturalmente, los padres, la familia y la cultura de
nuestro país son un componente muy importante de nuestra identidad. La Biblia
nos muestra otra más. El profeta Jeremías escribe: "Bendito quien confía
en el Señor y pone en el Señor su confianza: será un árbol plantado junto al
agua, que junto a la corriente echa raíces; cuando llegue el estío no lo
sentirá, su hoja estará verde; en año de sequía no se inquieta, no deja de dar
fruto". Echar raíces, para el profeta, significa volver a poner su
confianza en Dios. De Él viene nuestra vida; sin Él no podríamos vivir de
verdad. "Dios nos ha dado vida eterna y esta vida está en su Hijo".
Jesús mismo se presenta como nuestra vida (cf. Jn 14, 6). Por ello, la fe
cristiana no es sólo creer en la verdad, sino sobre todo una relación personal
con Jesucristo. El encuentro con el Hijo de Dios proporciona un dinamismo nuevo
a toda la existencia. Cuando comenzamos a tener una relación personal con Él,
Cristo nos revela nuestra identidad y, con su amistad, la vida crece y se
realiza en plenitud». (Benedicto XVI, Mensaje para la XXVI Jornada Mundial
de la Juventud 2011).
Dios Padre,
te pido por intercesión de tu Hijo Jesucristo, que me des la sabiduría y la
fortaleza para dejar que el Espíritu Santo actúe en mí, para que esta oración
sea un diálogo personal con tu Hijo Jesucristo, que me quiere decir lo mucho
que me amas. Amén
Ante Ti,
Señor
Jesús,
Estar aquí, ante Ti, y ya está todo,
Cerrar los ojos de mi cuerpo
Cerrar los ojos de mi alma
y quedarme así, inmóvil, silencioso,
abrirme ante ti, que estás abierto a mí.
estar presente ante ti, el infinito presente.
Yo acepto, Señor, este no sentir nada,
no ver nada,
no oír nada,
vacío de toda idea,
de toda imagen,
en la noche.
Heme aquí simplemente
para encontrarte sin obstáculo
en el silencio de la Fe,
ante Ti, Señor.
Amén.
Michel
Quoist
6°.
CONSOLACIÓN: Es sentir íntimamente el "gusto" de la Palabra de Dios.
7°.
DISCERNIMIENTO: Pensar y Discernir la Palabra.
· ¿Qué
imagen tengo Dios?
· ¿Qué
rostro de Jesús me revela el rostro de Dios?
· ¿Cuáles
son los signos que hacen creíble mi amor?
8°.
COMPARTIR: Comparto la Palabra.
9°.
DELIBERACIÓN: Tomo una decisión concreta iluminado por la Palabra.
10. ACCIÓN
CONCRETA: Propósito del día.
Que todas
mis palabras y obras expresen claramente mi condición de hijo de Dios y
discípulo misionero del Maestro.
SANTOS DE
HOY - PIDAMOS LA INTERCESIÓN DE TODOS ELLOS
-Santos
Saturnino, Neópolo, Germán y Celestino, mártires, Roma.
-Santos
Exuperio, Zoé, su mujer, Ciriaco y Teódulo, sus hijos, s. II.
-San Félix,
diácono y mártir, Sevilla.
-Santos
Videmial, Eugenio y Long¡nos, obispos y mártires, Africa, 489.
-San
Segundo, Avila, s. I.
-San
Antonino, arzobispo de Florencia, 1459.
-San
Germán, obispo y mártir de Amiéns (Francia), s. V.
-Santos
Simplicio y Ambrosio, mártires, Cataluña.
-San
Valentín, obispo de Génova, 325.
-Santa
Guivorada o Weib-Rath, mártir.