LECTIO
DIVINA DEL EVANGELIO DEL DOMINGO DE LA 15ª SEMANA DEL TIEMPO DURANTE EL AÑO. MARTES
14 DE JULIO 2015.
El método
de la Lectio Divina consiste en la lectura-escucha-meditación -orante de la
Palabra de Dios para encarnarla en la vida diaria.
1°.
ORACIÓN DE PREPARACIÓN:
Espíritu Santo, ilumina nuestras mentes, para que al
leer y meditar la Sagrada Escritura, sintamos la presencia de Dios Padre que se
manifiesta a través de tu Palabra.
Abre nuestro corazón para darnos cuenta del querer de
Dios y la manera de hacerlo realidad en nuestras acciones de cada día.
Instrúyenos en tus sendas para que, teniendo en cuenta tu Palabra, seamos
signos de tu presencia en el mundo. Amén.
2°. LECTURA DEL EVANGELIO:
Evangelio de nuestro Señor
Jesucristo según san Mateo. 11, 20-24
Jesús comenzó a
recriminar a aquellas ciudades donde había realizado más milagros, porque no se
habían convertido. “¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los
milagros realizados entre ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace
tiempo que se habrían convertido, poniéndose cilicio y cubriéndose con ceniza.
Yo les aseguro que, en el día del Juicio, Tiro y Sidón serán tratadas menos
rigurosamente que ustedes. Y tú, Cafarnaum, ¿acaso crees que serás elevada
hasta el cielo? No, serás precipitada hasta el infierno. Porque si los milagros
realizados en ti se hubieran hecho en Sodoma, esa ciudad aún existiría. Yo les
aseguro que, en el día del Juicio, la tierra de Sodoma será tratada menos
rigurosamente que tú”.
Palabra del Señor.
A.
COMENTARIO INTRODUCTORIO
- Los prodigios de Jesús son signos que anuncian la llegada del Reino.
- La respuesta del ser humano debe ser la conversión y la fe.
- Jesús una vez más se muestra pródigo en signos de verdad y amor, pero los beneficiarios de los mismosilagros aceptan lo que les interesa humanamente, pero se desentienden de los compromisos que esto significa.
- Por eso la voz de Jesús adquiere tonos proféticos y escatológicos de denuncia y condena.
- Estas tres ciudades: Corozaín, Betsaida y Cafarnaún, estaban situadas a orillas del lago de Galilea y fueron testigos privilegiadas de las grandes obras del Mesías; han visto con sus ojos las señales de los tiempos mesiánicos; han recibido la visita de los apóstoles. Pero no se han convertido.
- Tenían motivos más que suficientes para haber creído, sin embargo se resisten.
- Estas ciudades son sedes de escuelas rabínicas y centros de cultura religiosa. La invectiva a las ciudades mira, sobre todo, a los círculos intelectuales.
- Jesús se lamenta de ellas.
- Las compara con Tiro y Sidón con fama de impías, o con paganas como Sodoma por la corrupción de sus costumbres, y asegura que esas ciudades «malditas», seguramente se habrían convertido ante sus signos y prodigios.
- Cuanto más ha recibido uno de Dios, más tiene que dar.
- En todo momento nuestros actos son una elección “por o contra” Dios. No siempre pensamos en ello.
- Podemos creernos convertidos de una vez para siempre, y Dios deja de ser novedad en nuestra vida.
- Nos acostumbramos a vivir con poca fe y algunas obras buenas que nos tranquilizan, pero sin la fe desafiante que nos llama cada día al cambio.
- Nos conformarnos con un podo de fe y la autosuficiencia conformista es veneno para el corazón.
- Asistir todos los días a la Iglesia, o tener muchos gestos de piedad no son garantía de pertenencia al Reino. Vivir la experiencia del Reino de Dios, es una novedad que requiere de una conversión permanente
B.
REFLEXIÓN DEL PAPA FRANCISCO.
El único
deseo de Dios es salvar a la humanidad, pero el problema es que a menudo el
hombre quiere dictar las reglas de la salvación. Es la paradoja dramática de
tantas páginas de la Biblia que llega a su culmen en la vida terrena de Cristo.
Jesús expresa su disgusto al verse atacado por su misma gente, de la ciudad que le dan la espalda a su mensaje: «Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros realizados entre ustedes -es su advertencia a Corozaín y Betsaida- hace tiempo se habrían convertido». En esta severa, pero también amarga comparación, está toda la historia de la salvación.
Así como han rechazado y asesinado a los profetas antes que llegara Él, porque eran incómodos, ahora hacen lo mismo con Jesús. Es justamente la clase dirigente la que cierra las puertas al modo como Jesús quiere salvarnos. Y así se entienden los diálogos fuertes de Jesús, con la clase dirigente de su tempo: se pelean, lo ponen a la prueba, le ponen trampas para ver si cae, porque se trata de la resistencia a ser salvados. Jesús les dice: «Pero yo no les entiendo» y señala que ellos «son como aquellos niños: hemos sonado la flauta y no han bailado; hemos cantado un lamento y no han llorado ¿Pero qué quieren? ´¡Queremos salvarnos como nos gusta!». Es siempre este el cierre al mundo de Dios. (Cf. Homilía de Papa Francisco, 3 de octubre de 2014, en Casa Santa Marta).
Jesús expresa su disgusto al verse atacado por su misma gente, de la ciudad que le dan la espalda a su mensaje: «Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros realizados entre ustedes -es su advertencia a Corozaín y Betsaida- hace tiempo se habrían convertido». En esta severa, pero también amarga comparación, está toda la historia de la salvación.
Así como han rechazado y asesinado a los profetas antes que llegara Él, porque eran incómodos, ahora hacen lo mismo con Jesús. Es justamente la clase dirigente la que cierra las puertas al modo como Jesús quiere salvarnos. Y así se entienden los diálogos fuertes de Jesús, con la clase dirigente de su tempo: se pelean, lo ponen a la prueba, le ponen trampas para ver si cae, porque se trata de la resistencia a ser salvados. Jesús les dice: «Pero yo no les entiendo» y señala que ellos «son como aquellos niños: hemos sonado la flauta y no han bailado; hemos cantado un lamento y no han llorado ¿Pero qué quieren? ´¡Queremos salvarnos como nos gusta!». Es siempre este el cierre al mundo de Dios. (Cf. Homilía de Papa Francisco, 3 de octubre de 2014, en Casa Santa Marta).
¡Tarde te
amé belleza tan antigua y tan nueva, tarde te amé!
El caso es que tú estabas dentro de mí y yo fuera.
Y fuera te andaba buscando y, como un engendro
de frialdad, me abalanzaba sobre la belleza de tus
criaturas.
Tú estabas conmigo, pero yo no estaba contigo.
Pero me tenían prisionero lejos de ti aquellas cosas
que, si no existieran en ti, serian algo inexistente.
Me llamaste, me gritaste, y desfondaste mi sordera.
Relampagueaste, resplandeciste,
y tu resplandor disipó mi ceguera.
Exhalaste tus perfumes,
respiré hondo, y suspiro por ti.
Te he paladeado, y me muero de hambre y de sed.
Me has tocado, y ardo en deseo de tu paz.
El caso es que tú estabas dentro de mí y yo fuera.
Y fuera te andaba buscando y, como un engendro
de frialdad, me abalanzaba sobre la belleza de tus
criaturas.
Tú estabas conmigo, pero yo no estaba contigo.
Pero me tenían prisionero lejos de ti aquellas cosas
que, si no existieran en ti, serian algo inexistente.
Me llamaste, me gritaste, y desfondaste mi sordera.
Relampagueaste, resplandeciste,
y tu resplandor disipó mi ceguera.
Exhalaste tus perfumes,
respiré hondo, y suspiro por ti.
Te he paladeado, y me muero de hambre y de sed.
Me has tocado, y ardo en deseo de tu paz.
San
Agustín (Confesiones 10, 27, 38)
5°.
CONTEMPLACIÓN: Silencio ante la Palabra.
7°.
DISCERNIMIENTO: Pensar y Discernir la Palabra.
¿Me siento convertido?
¿Experimento
la novedad que me trae el evangelio?
¿Mi fe,
hace camino con mi vida?
8°.
COMPARTIR: Comparto la Palabra.
9°.
DELIBERACIÓN: Tomo una decisión concreta iluminado por la Palabra.
10. ACCIÓN
CONCRETA: Propósito del día.
Hoy voy a
tratar a los demás con humildad, dejando mi altivez y soberbia a un lado.
Estaré disponible y seré respetuoso con todos, especialmente con quien esté a
mi lado.
SANTOS DE
HOY - PIDAMOS LA INTERCESIÓN DE TODOS ELLOS
-Nuestra
Señora del Arbusto, Portugal, (1118)
-San
Avenancio, Confesor
-San Basino, Mártir
-San Camilo de Lelis (Lellis), Fundador (Memoria Litúrgica)
-San Ciro de Cártago, Obispo
-San Cynllo, Rey
-San Félix de Como, Obispo (Busco Estampa)
-San Basino, Mártir
-San Camilo de Lelis (Lellis), Fundador (Memoria Litúrgica)
-San Ciro de Cártago, Obispo
-San Cynllo, Rey
-San Félix de Como, Obispo (Busco Estampa)
-San Focas de Sínope, Obispo y Mártir (Busco Estampa)
-San Francisco Solano, Confesor, Vicepatrono y Apóstol de América
-San Guillermo, Abad
-San Heracleos, Obispo
-San Heraclas de Alejandría, Obispo (Busco Estampa)
-San Humberto de Romans, Religioso
-San Jilario, Confesor
-San Juan Wang Guixin, Mártir
-San Justo de Roma, Soldado y Mártir (Busco Estampa)
-San Landerico, Obispo
-San Liberto de Saint-Trond, Mártir
-San Marquelmo o Marcelino, Presbítero Monje
-San Marciano de Frigento, Obispo
-San Miguel María de la Mora y Mora, Obispo
-San Onésimo, Confesor
-San Optaciano de Brescia, Obispo
-San Rolando, Abad
-San Rufino, Confesor
-San Vicente Madelgario, Monje Abad
-Santa Adela, Viuda
-Santa Águila, Confesora
-Santa Deotila, Confesora
-Santa Gertrudis, Confesora
-San Francisco Solano, Confesor, Vicepatrono y Apóstol de América
-San Guillermo, Abad
-San Heracleos, Obispo
-San Heraclas de Alejandría, Obispo (Busco Estampa)
-San Humberto de Romans, Religioso
-San Jilario, Confesor
-San Juan Wang Guixin, Mártir
-San Justo de Roma, Soldado y Mártir (Busco Estampa)
-San Landerico, Obispo
-San Liberto de Saint-Trond, Mártir
-San Marquelmo o Marcelino, Presbítero Monje
-San Marciano de Frigento, Obispo
-San Miguel María de la Mora y Mora, Obispo
-San Onésimo, Confesor
-San Optaciano de Brescia, Obispo
-San Rolando, Abad
-San Rufino, Confesor
-San Vicente Madelgario, Monje Abad
-Santa Adela, Viuda
-Santa Águila, Confesora
-Santa Deotila, Confesora
-Santa Gertrudis, Confesora
-Santa Ragenofle de Incourt, Reclusa
-Santa Reinofra, Virgen
-Santa Rosnata, Mártir
-Santa Tuscana o Toscana de Verona, Viuda
-Santos Mártires de Angers
-Santa Reinofra, Virgen
-Santa Rosnata, Mártir
-Santa Tuscana o Toscana de Verona, Viuda
-Santos Mártires de Angers
San
Cayetano Errico, ruega por nosotros