Película basada en hechos de la vida real.
La película narra la historia del sacerdote de Palermo Giuseppe Puglisi, asesinado por la mafia siciliana ante la iglesia de la que era párroco el 15 de septiembre de 1993 –día en que cumplía 56 años-- y cuya causa de beatificación como mártir está en estudio. Don Pino Puglisi fue «culpable» de preocuparse por los niños del barrio Brancaccio de Palermo, un valor que entró en conflicto con los intereses del poder mafioso y que le costó la vida. A estos niños, que jugando a hacerse los duros acaban en la calle vendiendo heroína, don Pino logró regalarles una sonrisa, una esperanza y una vida que parecía perdida.