Nuestra Señora del Monte Carmelo, referida comúnmente como Virgen
del Carmen o Nuestra Señora del Carmen, es una de las diversas
advocaciones de la Virgen María. Su denominación procede del llamado
Monte Carmelo, en Israel, un nombre que deriva de la palabra Karmel o
Al-Karem y que se podría traducir como 'jardín'. Existen hoy en activo
órdenes carmelitas repartidas por todo el mundo, masculinas y femeninas,
las cuales giran en torno a esta figura mariana.
Según la tradición, durante la celebración de Pentecostés, algunos
Monte Carmelo, actual Israel, fueron convertidos al catolicismo tras
la aparición de una nube en la que iba una imagen de María. En ese monte,
fundaron un templo en honor a la Virgen y la congregación de los Hermanos de
Santa María del Monte Carmelo, la que pasó a Europa en el siglo XIII luego de
su persecución en Tierra Santa.
El 16 de julio de 1251, la imagen de la Virgen del Carmen se le habría aparecido
a San Simón Stock, superior general de la Orden, al que le entregó sus hábitos
y el escapulario, principal signo del culto mariano carmelita. Según es tradición
la Virgen prometió liberar del Purgatorio a todas las almas que hayan vestido
el escapulario durante su vida, el sábado siguiente a la muerte de la persona
y llevarlos al cielo, creencia que ha sido respaldada por los Pontífices.
La iconografía principal de la Virgen la muestra portando dicho escapulario.