martes, 23 de junio de 2015

Lectio Divina (Método en 10 pasos): Miércoles, 24 de Junio, 2015: Evangelio según San Lucas. 1, 57-66. 80.: (El nacimiento de san Juan Bautista. 12ª Semana del Tiempo Durante el año - Ciclo B -)


LECTIO DIVINA DEL EVANGELIO DE LA  12ª SEMANA DEL TIEMPO DURANTE EL AÑO. MIÉRCOLES 23 DE JUNIO 2015.
El nacimiento de san Juan Bautista.
La Lectio Divina se refiere a la lectura de la Palabra de Dios. Pero hay que precisar más. Se trataría de la lectura-escucha-orante de la Palabra de Dios.

1°. ORACIÓN DE PREPARACIÓN:
Señor Jesús abre mis ojos y mis oídos a tu palabra.
que lea y escuche yo tu voz y medite tus enseñanzas,
despierta mi alma y mi inteligencia
para que tu palabra penetre en mi corazón
y pueda yo saborearla y comprenderla.
Dame una gran fe en ti
para que tus palabras sean para mí otras tantas luces que me guíen
hacia ti por el camino de la justicia y de la verdad.
Habla señor que yo te escucho y deseo
poner en práctica tu doctrina, por que tus palabras
son para mí, vida, gozo, paz y felicidad.
Háblame Señor tu eres mi Señor y mi maestro
y no escucharé a nadie sino a ti. Amén.

2°. LECTURA DEL EVANGELIO:
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.  1, 57-66. 80
Cuando llegó el tiempo en que Isabel debía ser madre, dio a luz un hijo. Al enterarse sus vecinos y parientes de la gran misericordia con que Dios la había tratado, se alegraban con ella. A los ocho días, se reunieron para circuncidar al niño, y querían llamarlo Zacarías, como su padre; pero la madre dijo: “No, debe llamarse Juan”. Ellos le decían: “No hay nadie en tu familia que lleve ese nombre”. Entonces preguntaron por señas al padre qué nombre quería que le pusieran. Este pidió una pizarra y escribió: “Su nombre es Juan”. Todos quedaron admirados, y en ese mismo momento, Zacarías recuperó el habla y comenzó a alabar a Dios. Este acontecimiento produjo una gran impresión entre la gente de los alrededores, y se lo comentaba en toda la región montañosa de Judea. Todos los que se enteraron guardaban este recuerdo en su corazón y se decían: “¿Qué llegará a ser este niño?”. Porque la mano del Señor estaba con él. El niño iba creciendo y se fortalecía en su espíritu; y vivió en lugares desiertos hasta el día en que se manifestó a Israel.
Palabra del Señor.

3°.MEDITACIÓN DEL EVANGELIO:
A. COMENTARIO INTRODUCTORIO
  • En el Evangelio de hoy los vecinos se hacían la pregunta justa: “¿Qué va a ser este niño?”.
  • Era y es la pregunta que todos nos hacemos ante un recién nacido. ¿Qué mundo le tocará? ¿Qué profesión tendrá? ¿Será feliz? 
  • Un niño recién nacido es siempre un libro abierto y en blanco. Todas las páginas están por llenar. Cada niño que nace tiene siempre algo de profecía, de ruptura con el pasado y comienzo de algo nuevo. Es siempre un misterio.
  • Hoy celebramos el nacimiento de Juan Bautista.
  • Una vocación grabada a fuego desde el vientre materno.
  • Su futuro será sorprendente: anunciar la presencia de Jesús, el Salvador, y preparar sus caminos.
  • Nunca los padres imaginaron así el futuro de su hijo.
  • Lo que más se destaca en la vocación de Juan es su total dedicación a la tarea de convertir al pueblo ante la venida del Señor. Él ha visto la situación de su pueblo, ha experimentado que era necesario hacer algo, ha sentido que Dios lo llamaba, y se ha lanzado. Juan habla con dureza, es exigente, combate las desigualdades, las injusticias, las autosatisfacciones, la búsqueda indiscriminada del placer. Juan es tan exigente consigo mismo, hasta el punto que, comparado con Jesús, aparece casi exageradamente ascético; esa es su manera de mostrar que el proyecto de Dios es lo único importante.
  • Al contemplar el testimonio personal de Juan, contemplamos también su papel en la historia de la salvación. Contemplamos como Dios va marcando caminos, y escoge a hombres y mujeres para realizar su plan salvador. Juan es escogido con una función especialmente decisiva.
  • La primera lectura, le aplica a Juan el segundo cántico del Siervo de Yahvé, para señalar esta elección, que consistirá en empezar a encender en medio del pueblo de Israel la luz; que después será luz para todas las naciones.
  • Juan es una señal del amor de Dios por su pueblo. El nombre de “Juan” quiere decir “Dios concede su favor”, y se aplica hoy tanto al nivel doméstico de la vida de Zacarías e Isabel, que siendo ya ancianos tienen un hijo, como en el nivel de la historia de la salvación de Dios para todos los hombres.
  • Juan supo recoger toda la esperanza y anhelo de salvación que estaba en el corazón de su pueblo. Su palabra, atenta al devenir de la vida de los hombres de su tiempo, llegaba al interior de cada uno suscitando provocación, inquietud y haciendo que los ojos se abrieran al futuro. Su palabra
  • tambaleaba seguridades, fue “espada cortante” que llamaba con ímpetu, como la palabra de los profetas, a la conversión.
  • Juan representa el último escalón de la preparación de la venida del Mesías. El relato de Lucas, nos describe su figura con todos los rasgos característicos de los verdaderos profetas: la vocación que se manifiesta desde el nacimiento mismo, la posesión del Espíritu, la ascesis. Juan nace de unas entrañas estériles; es de familia sacerdotal y es profeta, destinado a designar al Mesías.
  • Como profeta capta los signos de los tiempos, en el punto preciso en el que el futuro le dará significación. No se expresa mediante conceptos; recurre a los signos y a los gestos, más que de solucionarlos, es capaz de vislumbrar los problemas. Su lenguaje es directo y crudo. Transmite un ‘mensaje’: es el heraldo del Mesías, que ha venido y que ha de venir”.
  • A la pregunta: “¿Qué va a ser este niño?”; le responde la primera lectura: “Te hago luz de las naciones“, pero al mismo tiempo la segunda lectura lo presenta lleno de humildad y totalmentesubordinado a Jesús: “Yo no soy quien piensan, sino que viene detrás de mí uno a quien no merezco desatarle las sandalias”. El propio Jesús define la figura de Juan: “entre todos los nacidos de mujer no hay profeta mayor que Juan; pero el más pequeño en el Reino de Dios es mayor que él”.
  • La grandeza de su vocación y la grandeza de la fidelidad con la que él la vive consiste en no ahorrar sacrificio, sabiéndose retirar cuando su misión está realizada, no pretendiendo entender más de lo que le es dado, sabiendo morir para no traicionar su verdad. Sabe disminuir y desaparecer para dar paso al único y verdadero Salvador.
  • La actitud clave que permite al Bautista actuar de esta manera es su desprendimiento. Juan no construye nada para él, ni siquiera un grupo de seguidores. Obra en función de otro. Tiene clara conciencia de ser puente y camino. Él no es el fin.
  • Para nosotros Jesucristo no es “el que ha de venir” sino “el que ha venido”. Pero igualmente podemos hablar de una necesidad de continuar su venida y por lo tanto, de una necesidad de continuar el trabajo de Juan: preparar la venida de Jesucristo a cada uno de nosotros, a cada hombre, a la humanidad, en cada momento de la historia. La voluntad de Dios y nuestra responsabilidad es que Jesucristo sea conocido y seguido a través de lo que nosotros hacemos. La vocación fundamental de cada cristiano es ser fiel a la misión de preparar el camino.
  • De ello depende el que la Buena Noticia de Jesucristo quede desconocida, falseada, o sea un anuncio que libere, que comunique fuerza, que renueve al hombre. Esta misión, cada uno tiene su modo de realizarla sin excusas.
  • Hoy el ejemplo de Juan nos muestra caminos para realizar nuestra vocación. Juan une la radicalidad de su palabra y la exigencia de su propia vida, con la fidelidad a lo que él dice. Es un hombre que dice y hace con exigencia, con radicalidad.
  • Nos enseña a reconocer a Jesús como lo más importante y como la verdad que debemos seguir. Juan nos enseña a cumplir con nuestra misión de discípulos de Cristo
  • viviendo en la verdad de su palabra; transmitir esta verdad a quien no la tiene, por medio de nuestra palabra y ejemplo de vida; a ser piedras vivas de la Iglesia. Nos hace ver la importancia del reconocimiento y arrepentimiento de los pecados.
  • En cierto modo, estas características de Juan son las que debemos tener como Iglesia con respecto a la persona y a la obra de Jesús. La vocación propia de la Iglesia es preparar el camino para el encuentro salvador de los hombres con Jesús. Su razón de ser radica en la misión de precursora de Jesús. Como Juan, la Iglesia está llamada a señalar a los hombres dónde se encuentra la verdadera salvación.
  • Ella sabe que los hombres pueden encontrar a Jesús de muchas maneras, y su mayor alegría consiste en disminuir para que Jesús crezca en el corazón de los hombres. El ejemplo de Juan nos debe estimular a la aceptación gozosa de nuestro papel, relativo y subordinado, pero lleno de la verdadera grandeza.

B. REFLEXIÓN DEL PAPA FRANCISCO.
"De la esterilidad, el Señor es capaz de recomenzar una nueva descendencia, una nueva vida. Cuando la humanidad se agota, no puede ir más, viene la gracia y viene el Hijo, y viene la Salvación. Y esa creación agotada deja lugar a la nueva creación…
Esta ‘segunda’ creación es el mensaje de hoy. Nosotros esperamos a Aquel que es capaz recrear todas las cosas, de volver nuevas las cosas. Esperamos la novedad de Dios.
Por otro lado, tanto la mujer de Manoa, madre de Sansón, como Isabel, tendrán hijos gracias a la acción del Espíritu del Señor. ¿Cuál es el mensaje de estas lecturas? Abrámonos al Espíritu de Dios. Nosotros solos no podemos. Es Él quien puede hacer las cosas.
Esto también nos hace pensar en la madre Iglesia, que también tiene muchas esterilidades: Cuando, por el peso de la esperanza en los mandamientos -ese pelagianismo que todos llevamos en los huesos- se vuelve estéril. Se cree capaz de dar a luz... no, ¡no puede! La Iglesia es madre, y se hace madre solo cuando se abre a la novedad de Dios, a la fuerza del Espíritu. Cuando se dice a sí misma: ‘Yo hago todo, pero, he terminado, no puedo andar más, entonces viene el Espíritu’". (Cf Homilía de Papa Francisco, 19 de diciembre de 2014, en Santa Marta).

4°. ORACIÓN: Dialogo con el Divino Maestro
Señor y Dios mío, tú siempre has elegido como instrumentos a personas humildes y dóciles. Por esto te he pedido la humildad para saberte reconocer y responder a tu llamado, porque sería imposible amarte y no comunicarte a los demás, tenerte y no compartirte. No quiero dudar como Zacarías, ayúdame a vencer el respeto humano y a no tener miedo a estar cerca de Ti y ayudar a los demás. Amén


Hoy te bendecimos, Dios de los apóstoles y de los profetas,
por la figura y testimonio de Juan el Bautista,
el precursor humilde e insobornable del Mesías, Cristo Jesús.
haz que nos tomemos muy en serio su mensaje siempre actual.

Así, convertidos al amor y la justicia de tu reino,
te cantamos a boca llena el canto de gozo de los convertidos.
Éramos tierra yerma y erial calcinado por el egoísmo,
pero tú eres capaz de hacer florecer nuestro desierto inhóspito.

Enséñanos a vivir en tu presencia y alabarte siempre
con el corazón alegre por tu amorosa gratitud de Padre,
porque todo es presencia y gracia, ternura y cariño tuyo.

Amén.
(B. Caballero)

5°. CONTEMPLACIÓN: Silencio ante la Palabra.
6°. CONSOLACIÓN: Es sentir íntimamente el "gusto" de la Palabra de Dios.

7°. DISCERNIMIENTO: Pensar y Discernir la Palabra.
¿Experimento mi vida como la realización de una vocación?
¿Qué determina mi respuesta cotidiana?
¿Valoro el papel que tengo en la construcción del reino?

8°. COMPARTIR: Comparto la Palabra.
9°. DELIBERACIÓN: Tomo una decisión concreta iluminado por la Palabra.

10. ACCIÓN CONCRETA: Propósito del día.
Hoy harpe una revisión de vida para ver si mis «talentos» los invierto para gloria de Dios o sólo en mi beneficio.

SANTOS DE HOY - PIDAMOS LA INTERCESIÓN DE TODOS ELLOS
-Nuestra Señora de Clos Evrard, Trier, Alemania (1449)
-San Agilberto de Creteil, y compañeros Mártires
-San Agoardo de Creteil, y compañeros Mártires 
-San Atanacio de Paros,
-San Ciriaco de Sataló, Soldado y Mártir
-San Farnacio de Sataló, Soldado y Mártir
-San Fermín de Sataló, Soldado y Mártir
-San Firmo de Sataló, Soldado y Mártir
-San Gunardo o Goardo de Nantes, Obispo y Mártir
-San Heroes de Sataló, Soldado y Mártir
-San José Yuan Zaide, Presbítero y Mártir
-San Juan Bautista (Natividad) (Memoria Litúrgica)
-San Juan de Terestes, Monje
-San Juan de Roma, Mártir
-San Longinos de Sataló, Soldado y Mártir
-San Orencio de Satalo, y Siete Hermanos Soldados Mártires
-San Rumoldo de Malinas, Eremita y Mártir
-San Simplicio de Autun, Obispo
-San Teodgaro de Vestervig, Presbítero
-San Teodulfo de Lobbes, Abad y Obispo
-Santa Febronia de Murom, Princesa de Rusia


San Cayetano Errico, ruega por nosotros

"Oración a San Miguel Arcángel"
San Miguel Arcángel,
defiéndenos en el combate diario.
Sé nuestro amparo
contra la perversidad y asechanzas
del demonio.
Reprímale Dios, pedimos suplicantes,
y tú Príncipe de la Milicia Celestial,
por medio del divino poder, arroja al infierno
a Satanás y a los otros espíritus malignos
que andan dispersos por el mundo
para la perdición de las almas.

Amén.