LECTIO DIVINA :
LUNES 31 DE MAYO 2010
TEXTO BÍBLICO:
Lucas 1, 39-45
María visita a Isabel39 A los pocos días, María fue de prisa a un pueblo de la región montañosa de Judea. 40 Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. 41 Cuando Isabel oyó el saludo, el niño saltó de alegría dentro de ella.
Isabel, llena del Espíritu Santo, 42 dijo en voz alta a María:
—¡Dios te ha bendecido más que a todas las mujeres! Y también ha bendecido al hijo que tendrás. 43 ¿Por qué has venido a visitarme, tú que eres la madre de mi Señor? 44 Tan pronto como oí tu saludo, el bebé saltó de alegría dentro de mí. 45 ¡Dios te ha bendecido porque confiaste en sus promesas! Sigue..........
María visita a Isabel39 A los pocos días, María fue de prisa a un pueblo de la región montañosa de Judea. 40 Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. 41 Cuando Isabel oyó el saludo, el niño saltó de alegría dentro de ella.
Isabel, llena del Espíritu Santo, 42 dijo en voz alta a María:
—¡Dios te ha bendecido más que a todas las mujeres! Y también ha bendecido al hijo que tendrás. 43 ¿Por qué has venido a visitarme, tú que eres la madre de mi Señor? 44 Tan pronto como oí tu saludo, el bebé saltó de alegría dentro de mí. 45 ¡Dios te ha bendecido porque confiaste en sus promesas! Sigue..........
TRADUCCION EN LENGUAJE ACTUAL.
1 - LECTURA¿Qué dice el texto?
Pistas para la lectura
Queridos amigos:
Hoy contemplamos una escena espectacular: corta pero muy intensa: la visitación de María a su prima Isabel. Solo Lucas nos narra este episodio.
María ya está embarazada de Jesús y se entera de que su anciana prima Isabel está embarazada también. Decide ir a visitarla y muy probablemente también a ayudarla y socorrerla con las tareas cotidianas. El relato hace hincapié en que María salió sin demora, es decir rápidamente. Desde Nazaret al norte, en la Galilea, hasta el sur montañoso cerca de Jerusalén hay un trecho muy largo y escarpado. María no duda y parte inmediatamente.
El saludo de María que lleva a Jesús, hace que el niño que Isabel lleva en sus entrañas salte de gozo. Isabel queda llena del Espíritu Santo y comienza su oración de alabanza y bendición. Es un “estallido” del corazón que envuelve toda la escena. En este contexto es muy importante notar como Isabel denomina a su prima María: la llama “madre de mi Señor”. La acción del Espíritu Santo en Isabel la hace reconocer espiritualmente la presencia del Señor. Al final volverá a felicitar a María por haber confiado en la promesa de Dios.
Es interesante constatar entonces que María lleva la presencia de Jesús a su prima que se llena de alegría. En este sentido María es la primera misionera cristiana. Antes de que nazca el mismo Salvador, María está evangelizando llevando a los demás la alegría del Señor.
Para tener presente: del 16 al 24 de diciembre se celebra la “Novena de Navidad”. En estos nueve días se relata cómo quedó embarazada la Virgen María y todo lo que pasó después con María y San José hasta el nacimiento del Niño Jesús.
1 - LECTURA¿Qué dice el texto?
Pistas para la lectura
Queridos amigos:
Hoy contemplamos una escena espectacular: corta pero muy intensa: la visitación de María a su prima Isabel. Solo Lucas nos narra este episodio.
María ya está embarazada de Jesús y se entera de que su anciana prima Isabel está embarazada también. Decide ir a visitarla y muy probablemente también a ayudarla y socorrerla con las tareas cotidianas. El relato hace hincapié en que María salió sin demora, es decir rápidamente. Desde Nazaret al norte, en la Galilea, hasta el sur montañoso cerca de Jerusalén hay un trecho muy largo y escarpado. María no duda y parte inmediatamente.
El saludo de María que lleva a Jesús, hace que el niño que Isabel lleva en sus entrañas salte de gozo. Isabel queda llena del Espíritu Santo y comienza su oración de alabanza y bendición. Es un “estallido” del corazón que envuelve toda la escena. En este contexto es muy importante notar como Isabel denomina a su prima María: la llama “madre de mi Señor”. La acción del Espíritu Santo en Isabel la hace reconocer espiritualmente la presencia del Señor. Al final volverá a felicitar a María por haber confiado en la promesa de Dios.
Es interesante constatar entonces que María lleva la presencia de Jesús a su prima que se llena de alegría. En este sentido María es la primera misionera cristiana. Antes de que nazca el mismo Salvador, María está evangelizando llevando a los demás la alegría del Señor.
Para tener presente: del 16 al 24 de diciembre se celebra la “Novena de Navidad”. En estos nueve días se relata cómo quedó embarazada la Virgen María y todo lo que pasó después con María y San José hasta el nacimiento del Niño Jesús.
Preguntas para la lectura· ¿Qué situación ha vivido María antes de este episodio (mirar los versículos 26 al 38)?
· ¿Qué primera indicación temporal se nos da?
· ¿Qué hace María al enterarse de que su prima está embarazada?
· ¿Piensa mucho en lo que tiene que hacer; vacila?
· ¿Qué ocurre cuando María saluda a Isabel?
· ¿Quién será el hijo de Isabel?
· ¿Qué persona de la Santísima Trinidad aparece en escena y qué hace?
· ¿Cómo reacciona Isabel? ¿Qué dice? ¿De qué forma lo dice?
· ¿Cómo la llama a María?
· ¿Qué característica particular Isabel reconoce como virtud de María?
· ¿Qué primera indicación temporal se nos da?
· ¿Qué hace María al enterarse de que su prima está embarazada?
· ¿Piensa mucho en lo que tiene que hacer; vacila?
· ¿Qué ocurre cuando María saluda a Isabel?
· ¿Quién será el hijo de Isabel?
· ¿Qué persona de la Santísima Trinidad aparece en escena y qué hace?
· ¿Cómo reacciona Isabel? ¿Qué dice? ¿De qué forma lo dice?
· ¿Cómo la llama a María?
· ¿Qué característica particular Isabel reconoce como virtud de María?
2 - MEDITACIÓN
¿Qué me dice? ¿Qué nos dice?
Preguntas para la meditación
· ¿Soy “rápido” para el servicio?
· ¿Tengo la actitud de María de salir de prisa a socorrer y visitar a quién me necesita?
· ¿Qué decisiones de mi vida estoy demorando hoy? ¿Hacia dónde querrá el Señor que vaya rápidamente y sin demora hoy? Perdonar a alguien… Comunicarme con quién hace tiempo no tengo contacto… Acercarme a tal persona…
· ¿Soy “dueño” de mi presente? ¿Elijo qué hacer y lo realizo sin demorarme?
· María lleva a Jesús: ¿imito esta actitud llevando la presencia del Señor a los demás?
· ¿Busco que la presencia del Señor dé sentido a mi vida y la alegre desde lo profundo del corazón?
· ¿Llevo la alegría de Jesús a mis hermanos?
· ¿Me dejo “llenar” por el Espíritu Santo?
· ¿Hago oraciones de bendición a Dios por lo admirable de sus obras?
· ¿Hablo en voz alta, grito la presencia desbordante del Señor en mi vida?
· ¿Reconozco a María como la Madre de mi Señor?
· ¿Me dejo admirar por el camino creyente de María, por su fe profunda en las promesas del Señor?
· ¿Busco imitar a María también en su ser auténtica creyente y discípula del Señor?
¿Qué me dice? ¿Qué nos dice?
Preguntas para la meditación
· ¿Soy “rápido” para el servicio?
· ¿Tengo la actitud de María de salir de prisa a socorrer y visitar a quién me necesita?
· ¿Qué decisiones de mi vida estoy demorando hoy? ¿Hacia dónde querrá el Señor que vaya rápidamente y sin demora hoy? Perdonar a alguien… Comunicarme con quién hace tiempo no tengo contacto… Acercarme a tal persona…
· ¿Soy “dueño” de mi presente? ¿Elijo qué hacer y lo realizo sin demorarme?
· María lleva a Jesús: ¿imito esta actitud llevando la presencia del Señor a los demás?
· ¿Busco que la presencia del Señor dé sentido a mi vida y la alegre desde lo profundo del corazón?
· ¿Llevo la alegría de Jesús a mis hermanos?
· ¿Me dejo “llenar” por el Espíritu Santo?
· ¿Hago oraciones de bendición a Dios por lo admirable de sus obras?
· ¿Hablo en voz alta, grito la presencia desbordante del Señor en mi vida?
· ¿Reconozco a María como la Madre de mi Señor?
· ¿Me dejo admirar por el camino creyente de María, por su fe profunda en las promesas del Señor?
· ¿Busco imitar a María también en su ser auténtica creyente y discípula del Señor?
3 - ORACIÓN¿Qué le digo? ¿Qué le decimos?
Para ayudar en la oración presentamos un extracto de una reflexión del Papa Benedicto XVI, realizada en una oración de vigilia en el Vaticano el 31 de mayo de 2007:
Qué impulsó a María, una muchacha joven, a afrontar aquel viaje? ¿Qué, sobre todo, le empujó a olvidarse de sí misma para pasar los primeros tres meses de su embarazo al servicio de su prima, necesitada de ayuda? La respuesta está escrita en un Salmo: «Corro por el camino de tus mandamientos, [Señor], pues tú mi corazón dilatas» (Sal 118,32). El Espíritu Santo, que hizo presente al Hijo de Dios en la carne de María, dilató su corazón a las dimensiones del de Dios y le impulsó por la vía de la caridad. La Visitación de María se comprende a la luz del acontecimiento que le precede inmediatamente en el relato del Evangelio de Lucas: el anuncio del Ángel y la concepción de Jesús por obra del Espíritu Santo. El Espíritu Santo fue sobre la Virgen, el poder del Altísimo le cubrió con su sombra (v. Lc 1,35). Aquel mismo Espíritu le impulsó a «levantarse» y a partir sin tardanza (v. Lc 1,39), para ser de ayuda a su anciana pariente. Jesús apenas ha comenzado a formarse en el seno de María, pero su Espíritu ya ha
llenado su corazón, de forma que la Madre comienza ya a seguir al Hijo divino: en el camino que de Galilea conduce a Judá es el mismo Jesús el que «impulsa» a María, infundiéndole el ímpetu generoso de salir al encuentro del prójimo que tiene necesidad, el valor de no poner por delante las propias y legítimas exigencias, dificultades, peligros para su propia vida. Es Jesús quien le ayuda a superar todo dejándose guiar por la fe que actúa por la caridad (v. Ga 5,6).
Para ayudar en la oración presentamos un extracto de una reflexión del Papa Benedicto XVI, realizada en una oración de vigilia en el Vaticano el 31 de mayo de 2007:
Qué impulsó a María, una muchacha joven, a afrontar aquel viaje? ¿Qué, sobre todo, le empujó a olvidarse de sí misma para pasar los primeros tres meses de su embarazo al servicio de su prima, necesitada de ayuda? La respuesta está escrita en un Salmo: «Corro por el camino de tus mandamientos, [Señor], pues tú mi corazón dilatas» (Sal 118,32). El Espíritu Santo, que hizo presente al Hijo de Dios en la carne de María, dilató su corazón a las dimensiones del de Dios y le impulsó por la vía de la caridad. La Visitación de María se comprende a la luz del acontecimiento que le precede inmediatamente en el relato del Evangelio de Lucas: el anuncio del Ángel y la concepción de Jesús por obra del Espíritu Santo. El Espíritu Santo fue sobre la Virgen, el poder del Altísimo le cubrió con su sombra (v. Lc 1,35). Aquel mismo Espíritu le impulsó a «levantarse» y a partir sin tardanza (v. Lc 1,39), para ser de ayuda a su anciana pariente. Jesús apenas ha comenzado a formarse en el seno de María, pero su Espíritu ya ha
llenado su corazón, de forma que la Madre comienza ya a seguir al Hijo divino: en el camino que de Galilea conduce a Judá es el mismo Jesús el que «impulsa» a María, infundiéndole el ímpetu generoso de salir al encuentro del prójimo que tiene necesidad, el valor de no poner por delante las propias y legítimas exigencias, dificultades, peligros para su propia vida. Es Jesús quien le ayuda a superar todo dejándose guiar por la fe que actúa por la caridad (v. Ga 5,6).
4 - CONTEMPLACIÓN¿Cómo interiorizo el mensaje? ¿Cómo interiorizamos el mensaje?
De manera libre cada uno puede detenerse en algún versículo o frase. Aquí les proponemos el final del versículo 45. Luego de leerlo, meditarlo y orarlo en los pasos anteriores, podemos transformarlo para la contemplación asumiéndolo en primera persona del singular y decir pausadamente…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
De manera libre cada uno puede detenerse en algún versículo o frase. Aquí les proponemos el final del versículo 45. Luego de leerlo, meditarlo y orarlo en los pasos anteriores, podemos transformarlo para la contemplación asumiéndolo en primera persona del singular y decir pausadamente…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
· Dios me bendice… porque, como María, confío en sus promesas…
5 - ACCIÓN
¿A qué me comprometo? ¿A qué nos comprometemos?
¿A qué me comprometo? ¿A qué nos comprometemos?
Propuesta personal
· Pensar en un propósito, según la propia situación de vida, y realizarlo sin demora, de prisa... imitando al prontitud de María para el servicio.
· Pensar en un propósito, según la propia situación de vida, y realizarlo sin demora, de prisa... imitando al prontitud de María para el servicio.
Propuesta comunitaria
· Proponerse realizar algún servicio concreto y puntual con tu grupo de Lectio Divina.
Pensar algo que pueda ser realizable a corto plazo y del que puedan participar la mayoría. Puede ser una tarea religiosa, o educativa o social… Según lo que el Espíritu Santo les inspire…
· Proponerse realizar algún servicio concreto y puntual con tu grupo de Lectio Divina.
Pensar algo que pueda ser realizable a corto plazo y del que puedan participar la mayoría. Puede ser una tarea religiosa, o educativa o social… Según lo que el Espíritu Santo les inspire…